Derramadas quedaron
en mis manos de amante
las tumbas calladas
de las hojas tristes del otoño.
Languidecen y caen doradas
adornando el cortejo de mi silencio.
El lago mezcla sus cantos fríos
sobre el alivio del recuerdo
Y en mi solitario corazón
Tu
wie der Kuss streicheln
wie Blut, um den Herzschlag
De ti me siento enamorado
como la caricia al beso
como sangre al latido del corazón
esta amiga admiradora de tu alma dulce e insigne de poeta te da infinitas gracias por concedernos el honor de sumergir nuestra alma en el bello manantial de tus letras, besinos miles con todo mi cariño y admiración.
ResponderEliminarSe le caerá la babilla,¿no?
ResponderEliminarY es que si además del precioso poema,le bordas un final así...
Pues que sí,que segura estoy de que babea de amor por ti.
Bonita foto por cierto.
Un besazo,poeta.
Precioso este vals otoñal, con caida de hojas y amor profundo
ResponderEliminarBesos, amigo
Hola Ozna, Marinel y Esmeralda, como el delicado sonido de la lluvia en verano son vuestros comentarios, siempre llenos de cariño. No os conozco personalmente, pero al igual que la luz de Otoño caía sobre la foto, plena de belleza, así en mi vuestra amistad. Gracias
ResponderEliminarHola Benito, que tierno y dulce poema me gusto mucho leerte tus palabras son una caricia para el alma, la imagen es muy bonita bella entrada.
ResponderEliminarBesitos y muchos cariños que estés muy bien feliz semana, querido amigo.